20 D, el día que votamos peligrosamente

Por DANIEL RIOBÓO BUEZO

¿Los españoles prefieren lo malo conocido a lo bueno por conocer? Las elecciones del domingo 20 de diciembre son históricas. Por primera vez y, según todas las encuestas, no sólo dos partidos compiten por el triunfo sino cuatro y con una alta participación no es descartable que Ciudadanos o Podemos puedan ser los partidos más votados. El  gran número de indecisos hace que cualquier acontecimiento de última hora o la interpretación del polémico Cara a Cara entre Rajoy y Pedro Sánchez pueda desnivelar la balanza a favor de uno de los cuatro. Una incertidumbre apasionante.

Parece que los jóvenes van a votar masivamente a los partidos emergentes, Ciudadanos y Podemos, que gracias a su ubicuidad y efectiva comunicación a través de los medios de comunicación y redes sociales han logrado movilizar a los menores de 40 años y al voto urbano según todas las encuestas. Mientras PP y PSOE siguen cosechando fundamentalmente sus apoyos entre la población más madura y en las áreas menos pobladas y rurales, que reparten casi la mitad de los escaños, un factor fundamental gracias a la cuestionada ley electoral.

Según el CIS, los jóvenes tienen intención de votar mayoritariamente a los partidos emergentes.
Según el CIS los jóvenes votarán principalmente a los partidos emergentes.

Lo que sí es evidente es que los nuevos partidos (que curiosamente no incluyen la palabra partido en su nombre por su connotación peyorativa) independientemente de que finalmente puedan gobernar, han contribuido a la regeneración y al renovado interés por la política en España. Su diagnóstico de la situación y sus propuestas reformistas, unidos al carisma y al dominio de los mensajes y las emociones de Albert Rivera y Pablo Iglesias, han despertado a los dos grandes partidos tradicionales que finalmente se han dado cuenta de que no pueden seguir anclados en el inmovilismo político y comunicacional. PP y PSOE también se han lanzado de lleno a la televisión, el nuevo campo de batalla electoral, e incluso intentan captar el voto más joven renovando su forma de comunicar.

Unión Progreso y Democracia e Izquierda Unida son los claros perdedores de la disputa televisiva. Siendo dos partidos con presencia en el Congreso y con una línea ideológica y un rumbo político coherentes, han sido discriminados y se han quedado fuera del plató en varios debates decisivos y en muchos medios. El auge y la ilusión generada por los partidos emergentes los ha condenado prácticamente a la insignificancia y puede que incluso a la desaparición parlamentaria debido al «voto útil». Sus denuncias judiciales de los casos de corrupción no sólo no se han visto recompensadas por el electorado sino que también han reducido su presencia mediática, una injusticia con Andrés Herzog y Alberto Garzón. El fulgurante ascenso de Ciudadanos y Podemos los ha situado en un segundo plano casi irrelevante en los medios.

Mientras Izquierda Unida se define como el único representante verdadero de la izquierda ahora que todos buscan ganar las elecciones desde el centro, en cuyo caladero de votos todos intentan pescar, como siempre han hecho Partido Popular y PSOE. Desde Ciudadanos, que reclama el centro presentándose como la tercera vía a imitación de lo que ha ocurrido en otros países, hasta en el viraje «hacia el centro del tablero» de Podemos, según la metáfora ajedrecística de Pablo Iglesias, el votante de centro es el más codiciado.

Las elecciones del 20 de diciembre son las más inciertas de la democracia española y probablemente supongan el fin del bipartidismo. Lo que es evidente es que sin una mayoría que se antoja imposible para gobernar en solitario pactar va a ser necesario pese a que Podemos y Ciudadanos han negado que vayan a entrar en un hipotético gobierno de Rajoy o Pedro Sánchez o incluso que vayan a apoyar su investidura. En esta situación, y visto que parece imposible que Partido Popular o PSOE pudieran formar una gran coalición, podríamos incluso estar abocados a unas nuevas elecciones dentro de unos meses. Todos estos condicionantes hacen que el 20 D sea un día clave de la democracia española donde cada voto puede ser decisivo. El día D ha llegado.

*A través de los enlaces sobre cada nombre del partido pueden consultarse los programas electorales para las elecciones 2015 del Partido Popular, PSOE, Ciudadanos, Podemos, Izquierda Unida-Unidad Popular y Unión, Progreso y Democracia.